Esta expresión se utiliza para dar una negativa cuando nos piden algo imposible de cumplir. La traigo a colación aquí para referirme al problema de los márgenes de la naranja, la quintaesencia que las Redes Sociales han encontrado estos días para referirse al enfado de los agricultores por el paro que les afecta, el SMI (que, por lo visto, también les afecta) y otras causas.

Según unos, los pequeños empresarios agrícolas producen a pérdidas por los bajos precios de sus productos de los grandes minoristas (poético contrasentido) que se comen sus márgenes y algo más.

Según otros, no es lo mismo una naranja a pie de naranjo que una en la estantería del súper. ¡Por supuesto que no, es muchísimo mejor la primera! Pero esta destrucción de su valor acarrea un mayor coste para los consumidores (otro contrasentido, menos poético). ¿Se entiende? No, ¿verdad? Volveremos sobre esto en unos días.

José Antonio Herce