A la espera de una vacuna contra el virus, que tardará meses, solo hay una cura eficaz: cortar el contagio de raíz o lo más cerca posible de la misma mediante un confinamiento extremo de los grupos de riesgo y mucho más allá, el aislamiento de territorios enteros entre sí y el corte de comunicaciones significativas de personas.

O esto corta en seco la geometría explosiva de la infección o el sistema sanitario no aguantaría su presión. El whatever it takes “draghiniano” carece de sentido mientras no se corte el contagio porque el coste económico del mismo se convierte en una diana móvil cada vez más grande.

Puede haber muchos perdedores y ningún ganador. Pero, al menos, hay muchos agentes económicos que seguirán percibiendo sus rentas puntualmente.

Pues bien, ha llegado el momento de crear un Gran Seguro Social Contra el Covid 19. Lo explico con más detalle a continuación.

José Antonio Herce